Mientras me daba ayer el segundo baño para quitar toda la tontería acumulada con las fiestas, me acordé de la explicación de Kiwi para los momentos de parón de olas: es el momento del cambio de funcionario. El hombrecillo que anda dándole a la manivela es relevado por otro que viene de tomarse un café y un bollo de mantequilla. Con la consecuencia de 20 minutos de parloteo en los que se deja la manivela desocupada.
Parece ser que en verano también tienen quieren ir a todas las jaias, y el sustituto es un estudiante en prácticas, que no tiene relevo ni nadie que le vigile, con lo cual no bombea. Y así estamos nosotros: en continua persecución de las pocas olas que nos regalan. Entre las fiestas, la lucha contra la resaca, la búsqueda de olas casi inexistentes y el proceso de desestresamiento en la playa, no tenemos tiempo para actualizar las entradas.
Vale la escusa?
Y si no tengo otra: nosotros también estamos en el momento de cambio de funcionario, y el jefe esta aislado de la tecnología e Internet y no tenemos quien nos vigile y meta presión.
Y para que soñeis con climas cálidos, izquierdas perfectas, y tubos infinitos os dejo este video de Ozzie Wright, 20 segundos disfrutando de una intensa relación con una ola. It's something!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Anímate a comentar en Karramarro Bila!