sábado, 26 de noviembre de 2011

La maldición de los inventos

No sé si alguien nos ha echado un mal de ojo o algo por el estilo, pero estos 3 últimos días nos han pasado una serie de cosas que miedo me da pensar que tengan que ver.

El jueves estuvimos 3 de nosotros surfeando, cuando a uno se le rompió el tapón que sujeta el invento a la tabla en una zona rocosa. Consiguió recuperarla antes de que se estampase, pero cogió una espuma para salir con tan mala suerte que le se le escapó la tabla. Y esta vez si que hubo consecuencias: 3 de las 4 quillas perdidas, alguna de ellas con sus respectivos tapones arrancados, bastante destrozo en la punta y el tail, algún toque en los cantos y el agujero del tapón del invento, causante de todo. Por lo menos había tenido un buen baño de 3 horas antes de esto...

Ayer otro invento jugó una mala pasada al segundo que estaba en el baño del jueves. En un pico con cierto tamaño, entró él solo para disfrutar de un bañito tranquilo sin gente. Segunda ola, le cerró y se cayó. En mitad del revolcón notó un "CLACK" seguido de un alivio de la fuerza que hace la tabla arrastrándote. El invento había partido dejandole la tabla a unos 5 metros, también en zona de rocas. Al nadar a toda prisa para recuperarla se hizo algún que otro corte en la mano con las rocas. Y no consiguió recuperar la tabla. Yo sigo preguntándome como consiguió salir de ahí nadando, a tanta distancia de la orilla como estaba, y la corriente que hay en la rompiente hacia las rocas...
El caso es que después de buscar la tabla un tiempo acabó dándola por perdida. Menos mal que unos amigos le animaron a que bajase por un acantilado a seguir buscándola y la recuperó en mucho mejor estado de lo esperado: La punta bastante aplastada y toques en los cantos con piedritas y algas.

Al enterarme de este segundo accidente lo primero que dije: el siguiente soy yo! Y así ha sido, solo que no ha tenido consecuencias para la tabla, sino para mí, que me he llevado el peor susto que he tenido nunca en el agua. Después de un muy buen baño he decidido coger la última para quedarme con el buen sabor, ya que cada vez había mas gente. Me he cogido una de las pequeñas para salir, pero me ha cerrado y me ha dado un revolcón. La experiencia me ha enseñado a mantener la calma siempre, aunque no era una ola por la que me debiera preocupar. El problema ha sido cuando me ha soltado, he nadado hacia arriba, hasta que he notado que el invento tiraba para abajo. Se había enredado con una roca y no me dejaba salir a por aire. He pegado un par de patadas para intentar soltarme, pero solo he conseguido darle a la roca. Así que he intentado soltarme el invento. Según me agachaba he notado como la siguiente ola empezaba a absorber el agua y como ya podía sacar las manos. He sacar la cabeza, y he conseguido asomar los ojos lo justo para ver como venía la siguiente. Nada de aire. Otro revolcón mientras intentaba, ya desesperadamente, soltarme el invento, cosa que parecía imposible. De repente he notado que podía sacar la cabeza y respirar. He gritado desesperadamente que alguien me ayudase, y me ha caido la tercera, esta vez ya con aire nuevo. No se como esta última me ha movido y se ha soltado el invento de la roca. Un buen susto... Por lo menos mi tabla está bien, que es lo único que nos importa a todos: la tabla!

Espero que ya hayamos pagado el precio de unas buenas olas para mucho tiempo. Así que ya sabéis, las rocas son tus amigas, te tienen más miedo ellas a tí que tu a ellas y mientras no las toques ellas no te van a hacer nada. Pero los inventos no...

5 comentarios:

  1. El Invento es nuestro enemigo!

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  2. ayudadme! ayudadme!! jaja buenos gritos as exau!

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  3. solo uno, cabrón! jaja, pero ha sido con mayúsculas!

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  4. Menudo agobio. Dónde se te ha enganchado a la roca, en qué spot ?

    Mi pesadilla con el invento: pillé una ola, y me caí, con el consiguiente revolcón debajo del agua, y el invento se me enredó alrededor del cuello, como si fuese una horca. La fuerza del mar tiraba de la tabla, y el invento apretaba mas y mas. POr suerte, agarre fuerte con las dos manos a la altura del cuello y no me apretó demasiado.


    Le echamos la culpa a los inventos por un par de sustos, pero... y los que nos ahorran?


    Ondo segi, blog galanta !

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  5. Eskerrik asko!

    Lo siento, pero por respeto a los locales preferimos no publicar en internet los nombres de los sitios, que luego pasa lo que pasa. Espero que nos entiendas

    Alguna vez también he sentido el invento cerca del cuello, pero nunca se me ha llegado a enredar. Aunque ya me pillé un dedo y lo tuve 2 semanas como una morcilla de negro y gordo. Para mi sin duda la mayor paranoia es cuando me pasa alguno surfeando cerquita mientras pincho una ola, que me enganche el cuello con el invento... mejor no pensarlo mucho!

    Un saludo!

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